Todos nos hemos encontrado en la tesitura de buscar un restaurante o de recomendar alguno a los demás. Son muchas cosas las que hay que tener en cuenta. Aquí os dejamos unos consejos interesantes a la hora de escoger o recomendar alguno:
Presupuesto disponible.
Antes de vivir la experiencia de comenzar a babear con los diferentes platos y menús que ofrecen en los restaurantes es importante saber de qué presupuesto estamos hablando. Ya no sólo es lo que uno puede gastarse, también es la economía con la que cuentan el resto de nuestros acompañantes al restaurante.
Teniendo en cuenta el tipo de restaurante al que uno puede acudir, también es importante valorar si tienen menús: del día, de degustación, para grupos, etc.
Las recomendaciones.
Por muchas recomendaciones que nos puedan hacer, a veces nos encontramos con experiencias terribles o magníficas en esos mismos lugares. Independientemente de eso, una de las mejores formas de acertar es basarse en las recomendaciones de los conocidos y, en segundo lugar, nunca está demás investigar en la red para conocer qué opinan otros consumidores que ya han acudido a dicho restaurante o cuáles son los platos que más han gustado.
¿Es un sitio muy concurrido?
Generalmente, los sitios concurridos suelen generar mayor confianza ya que -entre todos esos consumidores- suele haber un porcentaje relevante que está repitiendo la experiencia en dicho lugar o que se lo han recomendado.
Comida casera.
Esto es algo fundamental y esencial. Donde esté la comida casera que se quite cualquier otra opción y, cuando me refiero a comida casera, también incluimos los ingredientes frescos y lo más alejado de la comida precocinada o los congelados.
Platos típicos de la zona.
Si han venido amigos de fuera a la ciudad o hablamos de un viaje a otro lugar, solemos escoger siempre restaurantes que incluyan en sus cartas platos típicos de la zona. Esto requiere un poquito de investigación previa para conocer cuáles son dichos platos pero merece absolutamente la pena.
Reconocimientos.
Un aspecto a valorar también son los reconocimientos que haya conseguido dicho restaurante. No todo el mundo cuenta con estrellas Michelín o está incluido en la Guía Repsol o ha destacado en Trip Advisor.
Además, una de las cosas que marcan la diferencia a la hora de volver o no a restaurantes es la atención del servicio. No sólo la rapidez con la que sirvan o la amabilidad, sino que también puedan recomendarte platos de la carta con naturalidad.
Tiempo de espera y reservas.
Dependiendo de qué tipo de comida o cena vayamos a celebrar es importante tener en cuenta si se pueden hacer o no reservas, qué tiempos de espera suelen tener y la rapidez de los mismos. A su vez, también es interesante tener la posibilidad de esperar tomando algo en la barra, suele hacer mucho más cómoda la espera, por lo que es algo que también solemos tener en cuenta.
Variedad y menús especiales.
Hoy día cada vez hay más personas que sufren de algún tipo de intolerancia o no pueden comer algunos alimentos. Hay personas de muy variadas dietas alimenticias, por lo que siempre resultarán más interesantes lugares donde puedan comer vegetarianos, intolerantes y omnívoros.
Precios de plato y bebida.
Hay restaurantes que tienen unos precios en los platos baratísimos y, de repente, uno pasa a las bebidas y se encuentra con algo absolutamente desorbitado. Pues bien, esto es importante tenerlo en cuenta para no llevarse sorpresas cuando llegue la cuenta.
Habrá lugares donde esto compense pero en otros no.
Fuente: www.laopiniondemurcia.es